Para el primer semestre del año 2021 según Confecámaras se crearon 166.338 compañías en el país, de las cuales el 99,53% son consideradas microempresas acordes al valor de sus activos. Así mismo, para comienzos del año un total de 968.495 empresas han renovado su registro mercantil y 664.470 corresponden a personas naturales.
Las cifras mencionadas anteriormente pueden sugerir que, por cada 50 personas en Colombia existe una organización. A grandes rasgos se logra concluir que es un país lleno de empresarios, sin embargo, la gran mayoría de estas compañías están compuestas por microestablecimientos, lo cual quiere decir que tienen un máximo de 9 empleados.
A pesar de que las empresas sean pequeñas, son las que generan mayor empleo a nivel nacional, aportando ampliamente a los indicadores de desarrollo económico y así mismo, con el apoyo estatal y la generación de políticas públicas se fortalece este sector, el cual es un pilar fundamental en la mejora del país. Ahora bien, con todo esto surge una duda:
¿Cómo logran mantenerse en el mercado sin contar con un gran capital para comprar grandes máquinas para lograr competitividad?
Muchas organizaciones dirán que no son competitivas, sino que es una forma de generar autoempleo, ya que no hay trabajo una solución es ser emprendedor, el cual es un camino alternativo para mantenerse estable económicamente. Por ejemplo, constantemente vemos pequeños negocios que al pasar 20 años siguen siendo iguales de reducidos y en muchas ocasiones están en riesgo de cerrar; claro está que un gran número de compañías cierran sus puertas y quiebran en los primeros años de apertura.
No obstante, gracias al avance de las tecnologías de la información y comunicación (TIC); la especialización del trabajo; las ofertas globales de proveedores; la prestación de servicios personalizados o de productos y los procesos hechos a mano, han permitido a los microempresarios expandirse en el espacio mercado, garantizando el ingreso monetario suficiente para su perdurabilidad.
Se cree y argumenta que los microestablecimientos que han adoptado los procesos de las TICs en sus organizaciones, tendrán una mayor posibilidad de éxito.
Este supuesto se sustenta por las siguientes dos razones. Primero, la inversión en TIC, sin ser esta muy exigente en capital, puede bajar costos, lo que le permite a las empresas adquirir niveles de productividad necesarios para enfrentar los diferentes mercados. Un nuevo software o equipos tecnológicos pequeños en muchas ocasiones son suficientes para optimizar procesos productivos aumentando los márgenes de ganancia.
En segundo lugar, el uso adecuado de las tecnologías de la información y comunicación en estrategias de mercado pueden ampliar los ingresos de las compañías. En el año 2020 más de 26 millones de colombianos se conectaron a internet, de los cuales el 80% de la audiencia digital accedió desde sus dispositivos móviles y cerca del 60% utilizaron un computador; esto indica que los clientes están conectados siempre, solo varia su dispositivo.
Por ello actualmente existe la tendencia de poseer un sitio web, además que junto a estrategias de posicionamiento, SEO, se logra aumentar la posibilidad de aparecer en las búsquedas de los diferentes consumidores, y si se incluye en el paquete campañas publicitarias, el alcance a los clientes deseados se realizará en un menor tiempo.
Así que, si consideras que tu empresa necesita apoyo o deseas crecer en el mundo digital para ser una organización más competitiva en el mercado, no dudes en comunicarte con nosotros.